Según los expertos de la Universidad de Bristol, las personas más educadas tienen a trabajar más horas por lo que prefieren un animal de compañía como el gato que no necesita tantos cuidados diarios como un perro.
A diferencia de los perros, los gatos no necesitan caminar y pueden vivir con menos cariño y compañía humana.
“Los gatos requieren menos tiempo, así que son más populares entre la gente que trabaja hasta tarde o que tiene que realizar viajes por motivos de trabajo”, tal y como ha explicado Jane Murray, responsable de la investigación publicada en la revista Veterinary Record.
El mismo estudio demuestra además que los dueños de gatos son, en mayor medida, mujeres mayores.
La investigación ha sido realizado a casi 3.000 personas británicas que han revelado que en Reino Unido existen 10,3 millones de gatos y 10,5 millones de perros.
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